Por Alfredo Silletta
Hoy en día, el 51% de los argentinos volvería a votar al peronismo, siempre que no haya mejoras significativas en las políticas económicas del gobierno libertario. En la provincia de Buenos Aires, este porcentaje asciende al 54%. Sin embargo, detrás de estos números, que parecen favorables, surgen varios matices sobre el tipo de peronismo que los votantes desean apoyar.
Según un estudio de la consultora Sentimientos Públicos, el 34% afirmó que votaría al peronismo, mientras que un 15,5% dijo que existen altas probabilidades de hacerlo, en contraste con un 48,5% que declaró que nunca lo votaría. Un dato preocupante es que el 63% de los menores de 29 años consideran “nulas” las posibilidades de votar peronismo. Esto revela que muchos jóvenes “no recuerdan” ni tienen conocimiento de la “década ganada” y perciben al peronismo como parte de la “casta”, el mismo sector político que, en su opinión, los “encerró” durante dos años durante la pandemia, una visión que Milei ha sabido captar.
A pesar de la intensa interna entre quienes apoyaron a Cristina Kirchner para la presidencia del PJ Nacional, los sectores del interior con Ricardo Quintela a la cabeza y la “neutralidad” de Kicillof al no involucrarse en las internas, lo que le valió críticas de sectores de La Cámpora, la consultora indagó sobre el “tipo” de peronismo preferido.
El 25% señaló que prefiere un peronismo kirchnerista renovado, que priorice el consumo y la recuperación del ingreso, con una agenda progresista enfocada en la erradicación de la pobreza, los derechos y el ingreso básico universal. En este peronismo renovado, Axel Kicillof se destaca como el principal referente.
Un 12% prefiere un peronismo tradicional, que regrese a la doctrina de Perón, con un estilo más cercano al de Guillermo Moreno. Un 11% se inclina por un peronismo tecnológico, en alianza con grandes empresas nacionales energéticas, de software y agropecuarias, que ofrezca beneficios significativos a cambio de lograr pobreza cero, y alejado del juego democrático convencional. Un 7% prefiere un peronismo de centro, con figuras de trayectoria que generen un gran acuerdo productivo federal. En este grupo destacan el “cordobesismo”, Miguel Ángel Pichetto y algunos gobernadores. Finalmente, un 45% expresó que no le interesa ninguna de las opciones anteriores y que votaría al peronismo solo porque considera que los otros candidatos serían peores.
Para volver a ser mayoría, el peronismo necesita actualizar su lenguaje, proponer ideas innovadoras y renovar sus caras, sin dejar de lado a las figuras claves de su pasado. Según los datos de esta encuesta, el peronismo necesita a Cristina y a Axel trabajando juntos, sumando a otros sectores y formulando propuestas que atraigan a los más jóvenes.
Cristina ha decidido acercarse a la gente directamente; asumirá la presidencia del PJ y recorrerá el país. Es positivo mantener un contacto directo con la ciudadanía, escuchar sus reclamos y trabajar en una propuesta superadora.
Por su parte, Kicillof ha optado por enfocarse en la gestión diaria, destacándose como una alternativa al libertarismo y evitando las disputas internas. En los últimos días, se ha reunido con Sergio Massa y Juan Grabois, aliados dentro del peronismo. Para el 20 de noviembre, tiene planeado organizar un acto por el Día de la Soberanía en Vuelta de Obligado, San Pedro.
El peronismo necesita a Cristina y a Axel, trabajando juntos, codo a codo, para preparar una propuesta superadora que devuelva el bienestar al pueblo argentino.
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